Aún recuerdo mis años de universidad cuando tenía que estudiar y no sabía decantarme por la biblioteca o por la universidad. Y es que escoger un lugar u otro yo creo que no depende tanto de lo que te encuentras en cada uno de estos lugares sino de la personalidad del estudiante y de la forma de organizarse el estudio. Así que el estudiar en la biblioteca o en casa dependerá más de ti que de las instalaciones. Pero ¿qué es mejor?
Pero está claro que cada uno de los lugares tendrá ventajas y desventajas, por eso dependerá de ti el escoger el sitio en el que te sientas más cómodo/a para estudiar. Pero hoy quiero hablarte sobre algunas de las ventajas y desventajas de cada uno de estos sitios para que puedas decidir qué lugar va mejor contigo.
Estudiar en casa
Las ventajas de estudiar en casa sin duda es que no tienes que moverte de tu territorio conocido y puedes estar en pijama, tomarte un café cuando quieras y aislarte del mundo todo lo que necesites para concentrarte. Además podrás estudiar cuándo y cómo quieras. ¿Qué más se puede pedir?
Pero aunque parezca todo bonito también tiene sus desventajas como por ejemplo las distracciones. Para estudiar en casa se necesita mucha disciplina; apagar el móvil, nada de televisión, sin ruidos que te molesten y avisando a todas las personas que viven contigo que no te molesten porque necesitas tu tiempo de estudio.
Estudiar en la biblioteca
Las ventajas de estudiar en la biblioteca son claras: nada de ruido, ambiente de estudio y si hablas más de la cuenta te mandan a callar. ¡Concentración máxima! Pero también tiene desventajas… ¡las distracciones!
En la biblioteca también se necesita gran disciplina porque ir a la cafetería a desconectar de los estudios resulta muy tentador y más cuando estás tus compañeros con los que tan bien te llevas…
Elijas el lugar que elijas, tendrás que tener disciplina en el estudio porque estudiar en la biblioteca o en casa será tú decisión y de nadie más. Yo era (¡y soy!) de estudiar en casa ¿y tú?
