Buenas noticias para padres y docentes que trabajan con personas que sufren del Síndrome de Asperger, porque ahora podrán aprovechar una Guía de atención a estudiantes con Síndrome de Asperger, que presenta la Asociación Sevillana de Síndrome de Asperger. La misma ha sido realizada por la psicopedagoga de la Asociación, Margarita Coto Montero. Un trabajo que sin duda hará mucho por el trabajo en el aula de personas con Síndrome de Asperger.
Con 100 páginas de interesante información, la Guía de atención a estudiantes con Síndrome de Asperger, está encaminada a responder los interrogantes de los docentes respecto de cómo manejarse en la enseñanza con personas que padecen esta condición. Sin duda, todas las preguntas encontrarán respuesta, porque este trabajo, es resultado de las experiencias de los profesionales del centro Hans Asperger de Sevilla.
Aunque como hemos dicho, la Guía será de una gran ayuda para los educadores, la Asociación recomienda tener en cuenta que tanto las adaptaciones curriculares, como cualquier otra intervención, deben partir de un diseño altamente individualizado por la gran variabilidad en los perfiles personales que presenta el alumnado con TEA de alto nivel de funcionamiento o Síndrome de Asperger. Desde ya padres, educadores y profesionales interesados pueden acceder a este gran logro en favor de las personas con Asperger que nos presenta la entidad, descargando la misma en la web de la Asociación, pinchando aquí, ya que la publicación es de distribución universal libre y gratuita.
Para los que hasta ahora, desconocían la existencia del Síndrome de Asperger. Este es un trastorno que lleva el nombre de Hans Asperger un psiquiatra y pediatra austríaco, que en 1943 dio a conocer por primera vez el mismo. El Asperger es un conjunto de problemas mentales y conductuales que se sitúan dentro de los trastornos del llamado espectro autista. Quien sufre de Asperger tiene dificultades de interrelacionarse socialmente y también problemas de comunicación que varían de gravedad. Sus intereses y actividades suelen ser restringidas y en muchos casos estereotípicas.
A diferencia de quienes sufren autismo infantil, quienes sufren del síndrome de Asperger no sufren retraso en el desarrollo del lenguaje y no se evidencia retardo cuando llega la etapa de aprender las primeras frases y palabras. Sin embargo, existen particularidades cualitativas que pueden ser gramaticales, y también una preservación generalizada de la inteligencia. El Síndrome se detecta en la infancia pero algunas de sus características van apareciendo más adelante, cuando la habilidad para relacionarse socialmente, comienza a ser fundamental en el entorno de quien sufre Asperger.
