4 razones para salvar la Educación Pública

Actualmente atravesamos una discrepancia entre la escuela pública y la privada. La educación está tratando de convencernos de que la elección de los padres va a resolver los problemas de los futuros estudios de sus hijos. Una educación pública está llena de ventajas y tenemos que hacer saber las razones argumentaras del por qué una sociedad debe poder exigir este derecho.

Financiar la educación de millones de estudiantes no es tarea fácil, y es que los que disponen y manejan parecen haber olvidado la importancia de la colaboración y la cooperación, la disponibilidad para trabajar juntos.  Es cierto que la ecuación años atrás ha tenido diferentes derroches y, por decirlo de alguna manera, la escuela pública estaba en su mayor auge cuando cualquiera podía acceder a la universidad por sus bajas tasas y accesibles para todas las familias.

Una sociedad estable se hace gracias a grandes personas, no a la inversa y con la colaboración de la legislatura, cosa que actualmente no tenemos tan clara la transparencia de aquellos que gobiernan el país. La educación debe estar a la vanguardia de este pensamiento, y hoy comparto con vosotros cuatro razones para que la educación pública siga en vigencia.

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Es un derecho

Es un derecho que debe estar puesto a disposición de todos en igualdad de condiciones. Las escuelas deben brindar la oportunidad de poder formar a personas que en el futuro tengan una cultura y una formación ejemplar, para ello hay que ofrecer una educación de calidad.

Accesibilidad

La igualdad de oportunidades y una escuela defensora del derecho a la educación no está reñida con las crisis económicas ni de valores. Tampoco puede hacer una criba por el poder adquisitivo de las familias, debe garantizar el acceso gratuito a los ciudadanos, brindando una oportunidad de formación lo suficientemente eficaz para fomentar la cultura.

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El futuro

De las nuevas generaciones va a depender el futuro del país, una escuela participativa, democrática y con capacidad de investigación hará que se desarrollen nuevas metodologías, nuevas formas de aprender y un proceso de aprendizaje diferente.  Los estudiantes no son espectadores que van a ver obras de teatro o a escuchar monólogos, hay que enseñar a pensar y no enseñar a memorizar y ese es uno de los errores que se ha cometido a lo largo de todos estos años.

Reformas educativas

Ya sea por el cambio de legislatura o por las nuevas tecnologías, vemos cada (poco) cierto tiempo que el sistema educativo da un giro de 180 grados. No sabemos si eso será beneficioso para los estudiantes, pero de lo que estamos seguros es que la educación actual no tiene nada que ver con la de hace más de 10 años (y es poco tiempo).

El mito de la educación pública es el gasto de unas prestaciones que están fuera de control. Una forma magistral de propaganda que incitan a sentimientos negativos en los ciudadanos, que beneficia a las grandes empresas y con un interés financiero que en el futuro va a repercutir directamente al futuro de las nuevas generaciones.

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