Esta noticia puede sorprender a más de uno, sobre todo viniendo de la zona de la que viene, Silicon Valley, el mayor centro tecnológico del mundo, donde se encuentran las principales empresas a nivel mundial sobre informática.
Según hemos podido leer, los colegios Waldorf, donde los empleados que trabajan en estas empresas llevan a su hijos, rechazan completamente el uso de las nuevas tecnologías para el aprendizaje. Ellos consideran que la enseñanza es una experiencia humana, y la tecnología se trata de una distracción no ayuda en los distintos ámbitos de la enseñanza.
Esta idea de enseñanza sin elementos tecnológicos, choca con los pensamientos de muchas personas, que ven en este tipo de elementos una ayuda para la hora de educar a los niños.
Si lo pensamos un poco, en parte lleva razón, ya que si desde pequeño se acostumbran al uso de este tipo de herramientas que prácticamente pueden hacer de todo, los niños se pueden acostumbrar a ellas, y no utilizar su mente para el desarrollo de ciertas operaciones.
Con este tipo de pensamientos, estos colegios obtienen unos resultados sobresalientes cada año, pero aquí debemos de tener en cuenta, que cada alumno viene costando unos 20000 dólares al año a su padre.
Vía: Error500