El muñeco preguntame
RESULTA QUE Berberecho trajo un hermoso muñeco, que cuando le daban cuerda abría y cerraba los ojos y se reía. Todos los chicos querían tocarlo, pero él no se lo prestaba a nadie. – ¿Cómo se llama tu muñeco? – le preguntó Martina. – No sé – dijo Berberecho. – A los muñecos lindos se les pone nombre. – Sí,