«Despantállame»: Somos Conexión lanza guía para criar sin pantallas a niños de 0 a 3 años

La cooperativa de telefonía e internet, Somos Conexión, dio a conocer esta semana su innovadora guía «Despantállame», destinada a familias que buscan consejos y recomendaciones sobre la crianza sin el uso de pantallas en niños de hasta 3 años. La presentación del manual viene a raíz de crecientes preocupaciones sobre los riesgos asociados al uso excesivo y la sobreexposición de los más pequeños a dispositivos electrónicos.

Mercè Botella, socia fundadora de la cooperativa, junto con Anna Ramis, pedagoga y asesora escolar y familiar, han resaltado la importancia de evitar completamente el uso de pantallas en los menores de 3 años. Ramis, impulsora de iniciativas como el Manifiesto Infancia y Pantallas y la campaña #de0a3PantallesRES, recalca que, “mientras un niño está quieto frente a una pantalla, no cumple con actividades esenciales para su desarrollo, como moverse, jugar o interactuar con su entorno”.

El manual, que pronto estará disponible también en versión impresa, se distribuirá a aproximadamente 10,000 centros de educación infantil y a familias interesadas. La cooperativa, que previamente ha trabajado en el proyecto «Infancia y Pantallas», ofrece talleres, folletos y colaboraciones con expertos para elaborar guías como esta, siendo «Despantállame» la segunda publicación tras el éxito de la ‘Guía para familias crueles y malvadas’, centrada en la integración responsable del móvil en la vida de los preadolescentes.

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Uno de los puntos de preocupación destacados es la dependencia creciente de los menores hacia las pantallas, situación que se agravó durante el confinamiento debido a la pandemia. Un estudio de UNICEF indicó que durante este período, los niños utilizaron dispositivos electrónicos cerca de cuatro horas al día, un incremento del 76% en comparación con las cifras previas a la crisis sanitaria.

Además de las alertas sobre el impacto directo en los niños, Ramis enfatiza en la responsabilidad de los adultos. Las distracciones causadas por las pantallas en manos de los cuidadores limitan su capacidad para atender y conectar con los pequeños. Botella concuerda, sugiriendo que, «dedicar más tiempo a interacciones directas, como conversar durante la cena, promueve hábitos saludables y reduce la dependencia de las pantallas».

Finalmente, desde Somos Conexión, hacen un llamado a las familias para que establezcan límites en el uso de pantallas, enfatizando que el mejor método para enseñar a los adolescentes sobre el uso responsable es a través del ejemplo y no mediante imposiciones.